Princesa Matatía

los leyenda En el valle de Matatia comienza el recorrido de Puna, el famoso guerrero que dio nombre al pueblo de Punaauia. En este profundo valle vivían la princesa Matatia, cuyo nombre era Potii Pataaroa, y un malvado guerrero caníbal llamado Pilipeo.

La princesa Matatia y el helecho Maire

Cuando el sol empezaba a ponerse y el rocío soplaba en la isla vecina Maiao, la princesa Matatia se frotó con hojas mayores (polypodium vitiense), un helecho particularmente fragante, para perfumarse.

Fueron estos dulces olores llevados por el viento los que llegaron hasta Maiao donde residía el guerrero puna. Éste, atraído por este perfume, decidió partir inmediatamente para conquistar a la princesa, pero Pilipeo adivinó la artimaña de Matatia y le preguntó a su amigo de la infancia: Tetiaroa soplar muy fuerte desde el maramu para evitar que la canoa puneña se acercara a la costa.

El nombre Matatia también proviene de un episodio de la leyenda de la Puna. Fue en el valle de Matatia donde los ojos de Puna fueron atravesados por flechas. (Mata = ojos; Tia = traspasado)